12/06/2008

Otro año sin educación sexual en las escuelas - La Ciudad - LaCapital.com.ar
La educación sexual es aún una materia pendiente en las aulas argentinas. Esta es una de las principales conclusiones de la primera reunión federal destinada a evaluar la implementación del programa integral que propone esta enseñanza, y de la que participaron los ministros de Educación del país. Santa Fe lleva 16 años con una norma aprobada para esta enseñanza pero que nunca se aplicó.

Hace dos años se aprobó a nivel nacional la ley de educación sexual para todas las escuelas del país, y éste se aprobaron los lineamientos generales de enseñanza que deben impartirse en todos los niveles educativos. El miércoles y jueves pasados los titulares de las carteras educativas de casi todas las provincias se reunieron en Capital Federal para evaluar, fortalecer los equipos técnicos en las distintas jurisdicciones y compatir las experiencias que ya desarrollan las provincias de Entre Ríos, Corrientes, La Rioja, Catamarca y Santa Cruz.

El ministro de Educación de la Nación, Juan Carlos Tedesco, acompañado por el Secretario de la Nación, Alberto Sileoni, la coordinadora del Programa Nacional de Educación Sexual Integral, Mirta Marinam y la oficial de enlace del Fondo de Población de las Naciones Unidas, Eleonora Faur, fueron los encargados de presidir la reunión federal.

En el encuentro Tedesco recordó: "El Programa Nacional de Educación Sexual Integral está destinado a brindar educación sexual en todas las escuelas del país desde el nivel inicial hasta el superior no universitario a fin de ofrecer a nuestros niños y niñas a
través de la política educativa un futuro más digno para que sean ellos los que tomen sus propias decisiones de manera responsable, y al final de la escuela secundaria estén en condiciones de definir su proyecto de vida".

Además, afirmó que "es necesario construir valores colectivos y no valores autoritarios como a los que estábamos acostumbrados en el pasado en cuanto a la educación sexual, y a partir de ahí, los alumnos puedan tomar sus decisiones en base al conocimiento y no sobre
la base de la ignorancia".

Panorma desalentador

Las conclusiones de esta reunión pasaron por confirmar lo que ya se sabe en las escuelas: la aplicación de la ley es incipiente. Una de las trabas para que se efectivice esta norma es la falta de capacitación de los docentes, según explicó en la reunión de ministros la coordinadora del programa Mirta Marina. También el viceministro Sileoni advirtió, como ejemplo de esta dificultad, que más del 90 por ciento de los maestros está de acuerdo con esta educación en las aulas, pero la mitad confiesa no sentirse preparado para enseñarla. Y llamó la atención sobre la presión de los grupos conservadores que actúan en los distintos ministerio para que esta ley no se aplique.

Por su parte, la representante de Naciones Unidas, Eleonor Faur, indicó que "todavía la implementación de la ley es incipiente. Y está lejos de ser una política pública".

La educación sexual en las escuelas implica no sólo prevenir embarazos no deseados sino también prevenir enfermedades de transmisión sexual como el VIH/Sida, el abuso infantil, apostar por el cuidado del cuerpo y trabajar por una mejor convivencia.

Santa Fe, en mora

En 1992 se aprobó la ley de educación sexual en la provincia de Santa Fe, y en 1998 se reglamentó su implementación en las escuelas, es decir cómo debía enseñarse respetando las distintas edades de los niños. Sin embargo y hasta el momento, la normativa no es más que eso: letra escrita. Año a año las promesas de los distintos ministros que llegaron a la titularidad de la cartera educativa se repitieron como un latiguillo: "Este año se daría educación sexual", se los escuchó decir sin que nada ocurriese concretamente después.

El 2008 no fue diferente. A principios del ciclo lectivo, la actual ministra Elida Rasino se sumó a la lista de los que prometieron sin cumplir. Otro año se perdió sin que la educación sexual llegue a los chicos y jóvenes santafesinos. Un dato inexplicable para Santa Fe, si se consideran las valiosas experiencias encaradas por la gestión socialista en la Municipalidad de Rosario, en programas de avanzada como lo es Municipal de Sida, además de las numerosas ONG que ya trabajan en este terreno.

La necesidad de esta enseñanza la reclamaron hace poco un grupo de organizaciones no gubernamentales, que recordaron que el abordaje de temas relacionados con la sexualidad, la pareja, la anticoncepción o la prevención de enfermedades de transmisión sexual, por sólo citar algunos, "queda librado a la voluntad de los equipos docentes de cada escuela".

Entidades como Indeso Mujer, Asociación Civil Desde el Pie, Vox Asociación Civil, Casa de la Mujer y Amsafé Rosario se unieron para formar una coordinadora a fin de demandar "la implementación de la educación en sexualidad" en forma efectiva a partir del año próximo.

Resaltaron así el deber ineludible de las autoridades educativas de asumir la "capacitación y sensibilización de supervisores, directivos y docentes", incorporando a la currícula la educación sexual integral (ESI).

"Esta educación reviste importancia porque tiene como objetivo lograr un pensamiento crítico que posibilite la adopción de actitudes positivas hacia la sexualidad entendida como elemento inherente al ser humano", advirtieron representantes de las entidades en esa oportunidad.

Además, aseguraron que más allá de buscar acumulación de contenidos e información, la educación en sexualidad debe estar orientada hacia la vida, el placer y con un enfoque de género. En este marco anotaron las siguientes consignas: no discriminación, desarrollo de la autoestima, respeto a la diversidad, responsabilidad, cuidado mutuo y prevención de infecciones de transmisión sexual.

Embarazo no deseado, violencia y abuso completan los temas a abordar en el marco de la educación reclamada, que debe proveer "los elementos necesarios que permitan la apropiación del cuerpo y la libertad de decidir sobre él".

También indicaron que la demora en la implementación de la ley de educación sexual de la provincia implica "una clara violación a los derechos humanos y a la Convención de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes".

Para las organizaciones, el Ministerio de Educación debe responsabilizarse y dar respuestas, a través de la norma exigida, a graves problemas de salud pública como las altas tasas de embarazos no planificados o en niñas y adolescentes, sin contar el abuso sexual infantil, la mortalidad de mujeres asociada a la práctica de abortos clandestinos o los suicidios de adolescentes hombres y mujeres por su orientación sexual.

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